La Organización Mundial de la Salud (OMS) define la infertilidad como la incapacidad para concebir después de 12 meses o más de tener relaciones sexuales regulares sin protección.
La infertilidad puede clasificarse como primaria, cuando las personas no pueden tener un primer hijo, o secundaria, cuando una persona ha tenido anteriormente un bebé, pero es incapaz de concebir de nuevo. Tanto la infertilidad primaria como la secundaria pueden ser angustiosas.
Si no te has quedado embarazada después de un año de tener relaciones sexuales sin protección, debes someterte a otros estudios. Es posible que tengas que acudir a una clínica de fertilidad y recibir consejo para ayudarte a gestionar y procesar tus sentimientos.
Prevalencia
- Hasta el 95% de las personas adultas desean tener hijos en algún momento.
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Aproximadamente un 9% de los adultos tienen problemas de fertilidad.
Impacto sobre la salud mental y las relaciones
Someterse a estudios y tratamientos de fertilidad puede resultar muy angustioso. Las estadísticas demuestran que las parejas que no pueden tener un hijo tienen hasta tres veces más probabilidades de separarse o divorciarse.
Si crees que estos asuntos de fertilidad están afectando a tu salud mental, quizá desees recibir consejo para ayudarte a procesar tus pensamientos y sentimientos.
Causas de la infertilidad
Mujeres
Para que seas fértil, tu cuerpo necesita producir hormonas y óvulos de manera normal. Tus trompas de Falopio deben estar libres para que el óvulo pueda pasar hasta el útero y este debe poder soportar un embarazo. Si falla alguno de estos procesos, tendrás problemas para quedarte embarazada.
Los problemas de fertilidad en las mujeres están causados frecuentemente por un problema en la ovulación. Esto podría deberse a la edad, fumar, el síndrome del ovario poliquístico, la menopausia precoz o problemas hormonales.
Otras causas de la disminución de la fertilidad en las mujeres son la obstrucción de las trompas de Falopio, endometriosis y problemas en el útero, como miomas o pólipos.
Hombres
Para que un hombre sea fértil, debe producir y almacenar una cantidad adecuada de espermatozoides de buena calidad en los testículos y ser capaz de eyacular normalmente. Si estos procesos no funcionan correctamente, su fertilidad se verá afectada.
Con frecuencia, el motivo de la infertilidad en el hombre es desconocido. Cuando se detecta un problema, la causa más común está en el funcionamiento de los testículos, lo que impide la producción de espermatozoides, bien porque sus niveles sean bajos o estos sean de baja calidad.
En ocasiones, todas las exploraciones y pruebas salen bien y no puede establecerse la causa de la baja fertilidad. Esto se denomina infertilidad de origen desconocido.
¿Qué más puede afectar a la infertilidad?
Factores de estilo de vida
- Alcohol- La ingesta excesiva de alcohol puede reducir la calidad del esperma.
- Medicamentos- Algunos medicamentos y el uso de drogas de abuso también pueden afectar a la fertilidad tanto en hombres como en mujeres.
- Fumar- Fumar (incluidos los fumadores pasivos) se ha demostrado que reduce la fertilidad en las mujeres y la calidad del esperma en los hombres.
- Estrés- Se ha demostrado que los altos niveles de estrés influyen en la fertilidad de hombres y mujeres.
Problemas médicos o predisposición
- Obesidad- Un Índice de Masa Corporal (IMC) superior a 30 puede reducir la fertilidad tanto de hombres como de mujeres.
- Peso bajo- Un IMC inferior a 19 puede afectar a la menstruación, lo que puede reducir las posibilidades de embarazo.
- Tomar ácido fólico- Se recomienda a todas las mujeres que intentan quedarse embarazadas que tomen suplementos de ácido fólico para reducir los riesgos de tener un bebé con defectos del tubo neural.
Tu médico te explicará los estudios de fertilidad y las posibles opciones de tratamiento, como la fecundación in vitro, conocida también como FIV.
Conoce cómo se investiga la infertilidad y los pasos siguientes